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Dependencia Afectiva o Dependencia Emocional

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Foto by Alena Darmel.

DEPENDENCIA AFECTIVA (Dependencia Emocional)

Qué es la Dependencia afectiva o dependencia emocional.

Qué es la Dependencia Afectiva

Existen términos diferentes y diferentes definiciones, para intentar explicar este tipo de problemática y sus manifestaciones…así como también distintas maneras de abordarlo dependiendo del modelo desde el que se enfoque.

En general, varios modelos dentro de la psicología vienen a “reificar” este término , como si fuese algo dentro del individuo, o que forma parte de él, lo que se suele llamar “Etiquetar” a esa persona como  “yo soy DEPENDIENTE emocional.

Sin embargo, estas etiquetas, no explican nada, Soy Dependiente porque tengo dependencia emocional….poco o nada nos dice, sobre lo que está ocurriendo en la vida de la persona, y peor aún…cómo podría mejorar.

Dentro de los modelos de análisis de conducta clásico y los modelos contextuales, se intenta, analizar las variables que han  llevado a la persona a comportarse de una manera dependiente, y qué es lo que hace que se siga comportando así en la actualidad…

Foto by Timur weber

La Dependencia Afectiva (DA): Elementos históricos y Contemporáneos

Evolución histórica

El amor, entre todas las emociones, es el más humano, complejo y difícil de entender.

Desde una perspectiva puramente biológica, Sternberg y Weis (2006) describen el amor como un impulso, producto de la interacción entre sustancias químicas (tales como hormonas y neurotransmisores) con circuitos cerebrales y un gran correlato somático.

Estos mismos autores, ahora desde una perspectiva puramente evolucionista, afirman que el amor no es más que un instinto para preservar la supervivencia de la especie, que ha evolucionado hasta hacerse más social.

Las definiciones de aquello que se conoce como  Dependencia Afectiva, DA son tan variadas y ambiguas como el concepto mismo de amor.

 Para unos autores, la Depedencia Afectiva es un trastorno de la personalidad caracterizado por un patrón crónico y estable a lo largo de la vida con síntomas variados como depresión reactiva, trastornos obsesivos o síndromes desadaptativos.

Otros autores, la definen como un trastorno adictivo, en el que el objeto que provoca la adicción es la relación de pareja.

La persona realiza comportamientos dirigidos a evitar algunos pensamientos privados negativos y así, termina siendo controlado por su necesidad del otro y por las sensaciones, pensamientos y emociones asociadas a estímulos específicos o contextos, que anticipen o evocan, una amenaza para la relación o predicen la posible pérdida del ser amado.

Dos de los dilemas sobre Dependencia Afectiva.

Las teorías del Apego vs Dependencia como una Conducta Adictiva.

El apego ¿origen de la Dependencia Afectiva?

Los primeros aportes  sobre Dependencia emocional o Afectiva se basaron en el apego, entendido como el vínculo emocional que desarrolla el niño con sus cuidadores,  el cual proporciona la seguridad emocional indispensable para un buen desarrollo de la personalidad.

Se  describió la ansiedad de separación que algunos niños presentan y la similitud que esta guardaba con un tipo particular de vinculación inadecuada: el apego inseguro;  temor a la pérdida de la figura vinculada, búsqueda de proximidad y protesta por la separación .

Se concluyó que las interacciones con las primeras figuras de apego, y los efectos posteriores en hacer frente a amenazas, determinan el estilo de apego de la persona (o un repertorio comportamental) y organizan un conjunto de conductas que enmarcaran las relaciones con los otros durante la vida adulta.

Conducta de Apego

La conducta de apego especifica cualquier forma de comportamiento que hace que una persona alcance o conserve un cierto grado de proximidad con respecto a otra.

En muchas oportunidades, esa conducta es realizada por el adulto (p. e, una persona con patrón de dependencia) y se evidencia por una constante supervisión de aspectos como llamadas telefónicas, de los medios virtuales, discusiones frecuentes o reclamos sobre temas, situaciones o estímulos que impliquen algún tipo de amenaza.

La funcionalidad de este repertorio de conductas, es llamar la atención de la figura de apego y generar un acercamiento o cambio conductual en él (Bowlby 1980; 2003).

Foto by Timur Weber.

Dependencia Afectiva: ¿Un tipo de Adicción?

Numerosos de autores han sugerido una gran similitud entre la Dependencia Afectiva y la adicción.

 De hecho, sugieren comparaciones entre los criterios de dependencia a sustancias  químicas con características que normalmente presentan las personas con Dependencia emocional Afectiva:

  • Dificultad de control
  • Tolerancia ( cada vez necesita pasar más tiempo con la persona amada)
  • Abstinencia ( reacción de malestar si no se puede estar con el o ella)
  • Gasto excesivo de tiempo
  • Reducción de actividades sociales, laborales o recreativas
  •  Contacto constante con la pareja a pesar de tener conciencia de las consecuencias y problemas subsecuentes.

De esta manera, la dependencia amorosa podría ser incluida en aquel tipo de adicciones conocidas como comportamentales, como la adicción a Internet, a juegos de azar, al sexo y las compras, entre otras.

La connotación de «dependencia» propuesta para estas manifestaciones, también se sustenta en la necesidad del dependiente por la persona, tal como se da en las adicciones químicas con la sustancia.

El dependiente emocional quiere disponer continuamente de la presencia de la otra persona, por lo que,  requiere del contacto y la aprobación constante del otro.

No obstante lo atractivo e incluso audaz de considerar la Dependencia Afectiva como un tipo de conducta adictiva,  requiere de más investigación en esta línea, teniendo en cuenta la inmensa complejidad que encierran los trastornos adictivos.

Desde una perspectiva Contextual

Una perspectiva contextual de la Dependencia Afectiva..

Desde el análisis de la conducta,  el contexto se considera el elemento determinante de la conducta, es decir, esta se comprende solamente en el contexto total en el que ocurren los hechos y pensamientos.

 Las características en un patrón de Dependencia Afectiva puede describirse a partir de comportamientos emitidos por una persona que afectan directamente las relaciones interpersonales o de pareja y cuya funcionalidad puede derivar en la obtención de atención, mantenimiento de la cercanía o evitación de ciertos eventos amenazantes tales como una discusión o la pérdida del vínculo afectivo.

La dependencia afectiva por áreas

Área cognitiva:

Las características cognoscitivas (de pensamiento) o sus limitaciones y carencias de sujetos con DA.

El objetivo es analizar si la persona es capaz de interpretar adecuadamente su entorno social y hace razonamientos  apropiados.

Indagar los pensamientos, las reglas, marcos y filosofías respecto a una relación en pareja, es el objetivo fundamental en el abordaje de esta problemática.

De esta manera, es común encontrar un miedo desproporcionado a estar solo, pensamientos de no valer nada, de no merecer amor, que la pareja es infiel, entre muchos otros

Este repertorio es limitante en tanto que genera una dependencia extrema de los demás.

Área conductual:

Los comportamientos encaminados a disponer del otro, a expresar emociones intensas y a complacer por medio de la atención exclusiva a la pareja, dejando de lado necesidades e intereses personales incluso de manera obsesiva

Esto se refleja en las conductas de reparación y comprobación que suelen presentar estos individuos (v. g. llamadas o mensajes continuos, revisión de redes sociales, de objetos personales, entre otras), (Bogerts, 2005).

Estos comportamientos suelen ser resultado de la evitación que hace la persona a establecer contacto con sus experiencias privadas (v. g. pensamientos sobre lo que está haciendo su pareja, ansiedad al estar solo, estados emocionales de tristeza o preocupación) y se comporta deliberadamente para alterar, tanto la forma o frecuencia de tales experiencias, como las condiciones que las generan.

Llegan a producir una limitación en la vida personal del individuo.

Otro comportamiento habitual es la búsqueda activa de atención que asegure la permanencia de la pareja en la relación, una posición pasiva y sumisa o, en el extremo contrario, agresiva, guardando siempre el objetivo de mantener a la pareja.

Área emocional

Área emocional: Las competencias de la persona para identificar estados emocionales y afectivos en sí mismo y en los demás, así como la capacidad para relacionarlos con el contexto.

Una de las características fundamentales de la Dependencia Afectiva es la inestabilidad emocional que suelen manifestar las personas que la presentan (Joel, MacDonald & Shimotomai, 2010).

En sus relaciones, tienden a presentar altas y bajas emocionales, los conflictos aumentan su frecuencia y poseen niveles más bajos de regulación emocional.

 Manifiestan sentimientos de inestabilidad como el rechazo, miedo, abandono, rabia, pseudosimbiosis (no estar completo sin el otro) y culpa (Moral & Sirvent, 2009; Sophia, Tavares & Zilberman, 2007).

Además, estas personas  están tristes y preocupadas la mayor parte del tiempo y presentan un miedo irracional y desproporcionado a estar solos. Su estado de ánimo es por tanto  con tendencia a la ansiedad en los momentos en los cuales hay alguna señal de amenaza en el contexto o un pensamiento molesto.

La soledad es vista en la mayoría de casos como algo aterrador; algo a ser evitado y que podría explicar muchos de los comportamientos orientados a lograr mantener una pareja.

Autocontrol y solución de problemas:

Las personas con un patrón de comportamiento de Dependencia tienen la percepción de que los hechos ocurren como resultado del azar, el destino, la suerte o el poder y decisiones de otros (Moral & Sirvent, 2007).

Sumado a ello, en estas personas  existe una  dificultad de controlar el propio comportamiento.

De esta manera, es usual que sus conductas estén encaminadas a conseguir beneficios a corto plazo (como reducir su ansiedad al llamar o escribir mensajes a su pareja), en vez de otro tipo de actividades a largo plazo que pueden fortalecer la relación.

Propuesta de Intervención Psicoterapeútica.

Como se ha descrito a través del texto, las conductas de dependencia se inician y se mantienen por complejas interacciones entre el contexto, la conducta y sus consecuencias, requiriendo igualmente de un abordaje multifactorial, donde se tengan en cuenta aspectos biológicos, conductuales y sociales.

El objetivo fundamental es la mejora del comportamiento de las personas que buscan ayuda para sus problemas (Crespo & Larroy, 1998).

 Algunas estrategias sugeridas desde el análisis del comportamiento y las nuevas terapias de tercera generación, deben adaptarse de acuerdo a las características del usuario.

Técnicas de prevención de respuesta:

Exposición repetida a señale o estímulos (como pensamientos, emociones, sensaciones, o situaciones contextuales) en ausencia de conductas (que impliquen acceder a la pareja, llamar su atención u obtener verbalizaciones y expresiones emocionales).

Terapia de aceptación y compromiso.

Con la Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT) , en la que estamos especializados en APER Psicología, se examinan los problemas psicológicos a la luz de las prácticas sociales, específicamente, de las reglas de conducta interna que cada uno de nosotros tenemos y que gobiernan mal adaptativamente nuestra conducta.

En concreto, aplicable a la Dependencia emocional o Afectiva, se caracteriza por la inflexibilidad en el comportamiento de la persona, cuya principal función es controlar el malestar y los eventos privados (principalmente pensamientos), así como las circunstancias que los generan, mediante comportamientos de comprobación del amor de la pareja, de búsqueda o de atención.

Trabajamos en la  Aceptación psicológica, es decir, el estar dispuesto a aceptar las sensaciones y pensamientos problemáticos.

En los casos de Depedencia Afectiva, las numerosas formas de responder a los signos de malestar o de sufrimiento, genera efectos positivos (la persona cree que es correcto) y reduce los efectos negativos (porque de modo inmediato reduce en parte el malestar, la duda o el sufrimiento emocional).

Terapia Conductual  de pareja.

Se busca no solo el cambio en el comportamiento de la persona sino además, que esta acepte el comportamiento de su compañero.

Importante !!!

Encaminarse hacia una vida de valor, orientada a la acción y al compromiso, una vida que merezca ser vivida, y que dentro de unos se pueda decir…Hice aquello que merecía la pena para mi, aunque no fue fácil…y no deje que los de otros, determinasen los la elección de los mios

No olvides, que podemos mejorar lo que depende de nosotros, sin embargo, es complicado intentar que el otro cambie…

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